La recamara es el principal lugar para descansar, así que es importante poder llegar y sentir que puedes ir directamente a descansar y lograr reducir el estrés. Para poder lograr que tu recamara se vuelva un espacio relajante, tranquilo y de liberación de estrés, es esencial pensar en la funcionalidad que aporten los muebles y objetos decorativos que se encuentren en ella.
A continuación, te daremos algunos consejos para lograr que tu habitación se vuelva un lugar antiestrés:
Colores: Los colores neutros, como el blanco, beige y gris son aliados a la hora de dormir, ya que proporcionan menor estimulación, ayudándote a conciliar el sueño.
Saturación: Evita saturar de adornos y accesorios, ya que esto hará que no puedas concentrarte y así poder dormir tranquilo.
Ropa: Adquiere o instala un recipiente en el cual puedas guardar tu ropa sucia inmediatamente después de quitártela. Esto hará que no crees un desorden en tu cuarto, además de que puedes elegir un recipiente que aporte estética a tu habitación.
Ventilación: Asegúrate de poder darle la ventilación adecuada a tu recamara, para que así el aire se sienta más fresco y los malos olores no se queden estancados en la habitación.
Lugar asignado: Así como con el recipiente para la ropa, es importante regresar las cosas a su lugar para evitar que la recamara se vaya llenando poco a poco de cosas, reduciendo el efecto antiestrés que buscas lograr.
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